viernes, 26 de septiembre de 2008

Con la cabeza embotada


Así está mi cabeza hoy. Embotada, como una olla a presión. Parece que todo está a punto de estallar ahí dentro. Hay demasiadas cosas que nunca se comparten. Eso no puede ser bueno. Dios me libre de que no pille un cancer por guardar tanto veneno.

Es fin de semana. Para cualquier joven el día más esperado, Santo Viernes. Para mi días como todos los demás, aunque cuando me cogen de bajón como hoy, se me hacen agobiantes. Me sentía tan solo que fui a visitar a mis padres, para por lo menos sentirme algo más acompañado, pero me he vuelto con la sensación de soledad amplificada. Ellos salían cuando yo llegaba. ¡Ay!

He regresado a mi casa y el ambiente de encuentro de mis vecinos y sus familiares y amigos me produce envidia de la mala. Estoy pensando en cerrar la puerta y meterme temprano en mi cama. El sueño me hará dejar de pensar, por lo menos conscientemente, y tendré suerte si no tengo pesadillas como las de noches anteriores.

Mis miedos, mis ansiedades, mis desmotivaciones y mi poca fuerza de voluntad hacen de mi el reflejo de la más patetica imagen gráfica y ejemplificadora del avestruz que esconde su cabeza en el agujero. ¿Existe un plan para solucionar estos problemas? Yo se cuales son todos mis puntos débiles y no creo que un psicologo, además de sacarme los cuartos, vaya a encontrarme solución. Pero yo solo tampoco lo consigo. He de preparar un plan para cambiar de forma radical mi vida, como están las cosas ahora nada funciona.

Al menos por hoy creo que esconderé mi cabeza bajo el calor protector de las sábanas de mi cama. Allí dejaré de pensar y de deprimirme al menos durante una noche más.

2 comentarios:

Naturguru dijo...

Me sentia muy similar a lo que describe el post. Gracias a los consejos de mi Prima Pilar Barreto acudí al centro de Terapia Alternativa APCI C (análisis Psico-Corporal Interactivo) dirigido por el terapeuta Ángel Bonet.

Me diagnosticó stress crónico continuo. Durante seis meses hemos trabajado para desbloquear las tensiones crónicas de la musculatura de mi cuerpo y los bloqueos respiratorios, y como resultado, ha remitido el stress crónico continuo. Ahora soy una persona vital, enérgica con mucha ilusión por vivir la vida con plenitud.
No todo es lo que parece ser, y no quiero decir que mi caso se uno caracteristico, simplemente es una humilde eperiencia.
Felicitaciones.

elautor dijo...

Gracias por tus palabras 'naturguru'. Sin duda los consejos siempre son bienvenidos. Gracias ;)